Ayer viajaba en el tren inmerso en la
lectura del cuento “El Jorobadito” de Roberto Arlt, cuando escuché por
altoparlantes: "el tren del anden 1 se canceló por un corte de vías en
Huwson". Miro hacia afuera y descubro que el anden 1 éramos nosotros. La
gente desconcertada empieza a insultar, a maldecir, la mayoría son usuarios
nuevos del tren, usuarios vip que sólo viajan en el nuevo servicio diferencial
hacia La Plata ,
personas de camisa y corbata que nunca viajaron en un Roca con chispas y olor q
quemado en el techo o con gente colgada en los estribos por no haber lugar. Para
todos ellos era su primer corte, y el quedarse varados en medio de Quilmes podía
convertirse en la peor de sus pesadillas.
Como siempre, decidí seguir a la mayoría
(tengo la teoría de que si uno no sabe hacia donde ir tiene que seguir al malón
y de alguna forma va a llegar a donde quería), nos juntamos en medio del hall
de la estación donde un tipo de camisa blanca y silbato de árbitro colgado del
cuello trataba de explicarnos que por culpa de la tormenta de principio de
semana se habían organizado varias manifestaciones sociales (reclamando por la
falta de luz o agua), una de las cuales había cortado las vías del tren, otra
cortado la autopista Bs. As./La
Plata a la altura del Easy, y otra cortado la Av. Calchaquí en Florencio Varela.
O sea, los tres accesos a la ciudad estaban bloqueados, no había manera de llegar. Algunos gritaron,
otros patalearon, otros consultaron por el boleto a lo que les informaron que les
devolverían la guita del mismo, así que seguí a otro grupo hasta las
ventanillas a que me recarguen la sube con lo que me habían sacado. En la cola,
adelante mío había una parejita joven, un pibe de unos veintipico de años del
brazo de la que parecía ser su novia. Me quedé atrás escuchando los insultos
del resto de los usuarios hasta que pude recuperar mis 8 pesos.
Luego me decidí por volverme a capital
para ir a tomar unas cervezas con los amigos, ya había vivido esta situación, y
la experiencia me decía que tratar de llegar cueste lo que cueste solo
complicaba las cosas, pero escuché a lo lejos que alguien grito "hay que
tomarse el 334 hasta alpargatas", y me pareció buena idea, las ganas de
ver a mis hijos pudo más que la experiencia.
Abandoné la estación, y me encontré con
un sin fin de colas de esperas de colectivos, era un mar de gente intentando
subir a un bondi. Caminé un par de cuadras y le pregunté a un diarero (los
diarieros y los taxistas saben de todo, sino lo inventan) si conocía algo para
llegar a la rotonda Alpargatas, me indicó una garita a mitad de cuadra, y me
coloqué detrás de una señora a esperar lo que venga. En cierto momento le
pregunto "vos que tenes cara de saber del tema, para llegar a alpargatas
es acá?", me sonrió y me dijo que nunca había llegado hasta ahí, luego
continuó "ese que está ahí es el guarda, preguntale a él". Lo paré al
tipo, le pregunté, y me señaló un bondi donde estaba subiendo mucha gente. Me
pongo en la fila y veo aparecer a la parejita joven de la cola de la boletería.
El flaco me va cara conocida y me pregunta "Ud. va hacia La Plata , no?". El Ud. me
pareció raro, pero se la dejé pasar. Le dije que intentaba llegar a Alpargatas
y de ahí veía, que se vengan conmigo, que a lo sumo nos perdíamos todos juntos,
ambos aceptaron y subieron detrás mío.
Sacamos boleto y entramos como pudimos. El
pibe me mira y me dice "Señor, ¿Ud. sabe donde tiene que bajarse?". Y
me empezó a parecer que el pibe me estaba tomando el pelo, o es que con camisa
y la cara de orto de ese momento me veía mucho mayor a lo que soy en realidad. Esta
bien que esté viejo, pero no para que me trate de señor un pibe de veinti pico
de años. Le digo "no, pero despreocupate, a algún lugar vamos a
llegar". No se rió, se abrazó más fuerte a la novia, y todos emprendimos
viaje.
Tuvimos como 40 minutos de viajando,
hasta que me paré y le pregunté al chofer cuanto faltaba para Alpargatas. Al
responderme “la que viene” me acerqué a los pibes, le dije que nos bajábamos en
esta, y veo que como 10 personas se paran a la vez. Todos bajábamos en el mismo
lugar. Descendimos del bondi y me fui hacia la parada del Plaza, los pibes y las
otras 10 persona me seguían de cerca. Me metí en una cola, y una joven se me
acerca y me pregunta si viajaba a La
Plata , si salía desde ahí. Le digo que sí, que yo voy para el
mismo lado, me agradece, me sonríe y se pone en la fila. A los pocos minutos
veo que a media cuadra de donde estábamos para un 338 (TALP) que va hacia La Plata , es más lento que el Plaza,
pero llega igual. Me doy vuelta y les grito a los pibes y a la otra chica
"Ahí está el TALP, ese los lleva a La Plata , no se que hacen Uds., pero yo pienso
correrlo", me voy vuelta y empiezo a correr. Llego con el último que se
estaba subiendo y detrás mío veo aparecer un malón de personas corriendo, todos
los que estaban en la parada del Plaza, todos los que estaban en el 334.
Sin darme cuenta me había convertido en
la mamá Ganso de un grupo de 13 personas, me podría haber tomado un bondi a Mar
del Plata que los chavones me hubiesen seguido.
Yo no tenía la menor idea de qué hacer
pero parece que siempre hay gente peor que uno que sigue a un líder sólo por su
apariencia y no por su conocimiento o su capacidad.
Parece que lo que hice ayer no difiere mucho de lo que hace o debería hacer un político. Se me planteó un problema, me interioricé en el mismo, analicé las posibilidades para solucionarlos, me dejé guiar por mis instintos (aún en contra de mi experiencia) para salir adelante, consulté a las personas adecuadas, a las que tenían la información que necesitaba o sabían del tema, arrastré a un montón de personas conmigo a base de promesas sin fundamentos para sostenerlas, se me sumó mucha más gente en el camino motivados por vaya uno a saber qué pero lo hicieron, y al final terminé resolviendo el problema para mi y para el resto que me acompañaba aunque el resultado esperado no haya sido el óptimo (llegamos a las 21 hs en vez de a las 18:30).
Ayer me dí cuenta de que estoy capacitado para llegar a ser Presidente.
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